
¡Alerta Máxima en Cuba! El Huracán Melissa Impulsa la Preparación con un Consejo de Defensa Municipal en Sesión Permanente
Cuba se enfrenta a una amenaza ciclónica de proporciones mayores. El huracán Melissa, que ha escalado rápidamente a Categoría 4 en la escala Saffir-Simpson y se desplaza lentamente por el Caribe, representa un peligro inminente y potencialmente catastrófico para el oriente cubano, con pronósticos que sugieren que su centro podría acercarse o impactar la región a mitad de semana.
Ante la gravedad del fenómeno, el mecanismo de protección civil de Cuba se ha activado con la máxima urgencia. Un claro ejemplo de esta respuesta vital se vivió a primera hora de la mañana con la reunión del Consejo de Defensa Municipal (CDM), un encuentro estratégico para garantizar la protección de vidas humanas y recursos económicos.
Preparación Sin Tiempos Muertos
El CDM, presidido por Lisban Ramires Ismael y con la participación de la vicepresidenta Arais Miralles, sesionó en el Centro de Gestión de Riesgo municipal para abordar con detalle el enfrentamiento al poderoso fenómeno tropical.
La agenda de trabajo demostró la visión integral de la defensa civil cubana. Se debatieron temas de vital importancia que van desde el abastecimiento de alimentos a la población y la preparación logística de los centros de evacuación, hasta la caracterización exhaustiva de los hogares y comunidades en alto riesgo de inundaciones.
El presidente del CDM, en un llamado a la acción inmediata, orientó que la jornada de mañana se destine a la venta del arroz de la canasta básica tan pronto llegue el MINCIN, sin importar la hora, asegurando que ninguna familia quede desprotegida. De igual modo, se priorizó la revisión de las producciones del centro de elaboración de la empresa y comercio para ofrecer una variedad de alimentos a la población en medio de la contingencia. Además, se hizo un llamado a utilizar todos los medios, desde megáfonos y equipos de audio, para mantener al pueblo informado de cada medida y la evolución del huracán.
Logística y Articulación Comunal: Claves de la Defensa

La infraestructura de protección fue confirmada por los responsables. La jefa del subgrupo de evacuación aseguró que los centros de evacuación están listos y debidamente abastecidos de alimentos, preparados para acoger a las familias vulnerables. El subgrupo de transporte, por su parte, ratificó la disponibilidad de los medios necesarios para el traslado seguro de personas.
En este escenario de alta complejidad, la previsión de recursos esenciales es fundamental. Robert Maikel Rosa, jefe del departamento de la defensa, hizo hincapié en la necesidad de tener las reservas de carbón listas, recurso vital ante posibles interrupciones eléctricas.
Una de las medidas más relevantes para el manejo de la crisis es el sistema de comunicación directa. La vicepresidenta del CDM, Arais Miralles, destacó el diseño de un sistema de retroalimentación en tiempo real que involucra a delegados y personas de cada comunidad. Este engranaje funciona como un enlace esencial para enfrentar de manera precisa cualquier situación que se presente, especialmente en las zonas bajas proclives a inundaciones, donde el lento desplazamiento de Melissa aumenta el riesgo de lluvias torrenciales y acumuladas.
El Peligro de Melissa: Vientos Catastróficos y Lluvias Prolongadas
La urgencia de las acciones se justifica con el estado actual de Melissa. Los reportes meteorológicos indican que el huracán, ahora de Categoría 4, representa una amenaza potencialmente mortal. Su lento avance por el Mar Caribe es el factor de mayor preocupación, ya que no solo implica vientos destructivos sino la acumulación de lluvias torrenciales durante un periodo prolongado.
Este panorama se traduce en un riesgo extremo de inundaciones repentinas, crecidas de ríos y peligrosos deslizamientos de tierra, particularmente en el oriente de Cuba, que ya se encuentra en Fase de Alerta Ciclónica. Los modelos de trayectoria sugieren que Melissa podría mantener su fuerza de huracán mayor al acercarse a la isla.

La experiencia acumulada de Cuba en el enfrentamiento a fenómenos de este tipo, basada en la premisa de proteger las vidas humanas en primer lugar, se pone a prueba con Melissa. La preparación integral, desde la cúpula del Consejo de Defensa hasta el último delegado de circunscripción, es la línea de defensa para mitigar el impacto de un huracán que ya ha cobrado vidas y causado devastación en otras islas del Caribe. La consigna es clara: prevenir hasta lo más mínimo para asegurar la recuperación total.




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